domingo, 29 de noviembre de 2009

Te recuerdo, Allende...

Los sábados pienso en Salvador: su figura realzando lo humano, ese plus que nos da la vida cuando termina el trabajo y su fatiga. Lo certero de su silueta acariciando el espíritu, cultivando al ser humano entre solidaridad hasta sacarlo de las ruinas... los sábados suelo llorar en silencio y sin consuelo, apretando puño y mandíbula, conteniendo la revolución que llevo dentro... a la vista de toda la chusma que se agolpa sin cerebro en las colas del Carrefour.

viernes, 27 de noviembre de 2009

AUTOAYUDA

No me da la gana ser depresivo.
Abandoné esa tendencia cuando descubrí el objetivo de todo el montaje llamado “vida” a mi alrededor; podría llamarse “teoría de la conspiración” si os gusta ese nombre... el caso es que contemplando con frialdad el conjunto de la realidad entera, concluí que todo estaba dirigido a mi autoaniquilación. Vencerme desde dentro.
Gracias a mi megalomanía (en el fondo quizá sea genialidad) convertí “la contraria como sistema” en antidepresivo. Poco tiempo después, como colofón, descubrí las endorfinas. Desde entonces, en mi cerebro todo encaja como una llave en su cerradura.
¿La realidad? Ha dejado de interesarme como tal, si no es para transformarla. Venceremos o moriremos...

jueves, 12 de noviembre de 2009

OJALÁ LLOVIERA SIEMPRE


Quiero ser una de vosotras
las que entráis siempre riendo,
la que me seduce con su encanto
y a quien seduzco con mis palabras…
las de ahora o las de siempre.

Quiero ser… ser y ser sido
como los retretes de los bares
con ambientador de juventud perdida.

Puesto a pedir quiero también
ser gato en las próximas seis vidas:
mirar por la ventana en tardes grises
olvidado ya del hombre, de los hombres…
viviendo dentro de tu cuerpo y de tus cofres,
ser una que eres tú y no cualquier otra.

Aunque tus ojos de olvido ya no quieran
saber que ahora es presente aquel pasado
que una vez soñamos ateridos frente a la estepa
como una sola proyección de dos futuros.

Puestos a resumir quiero decirte
que este idioma caduco que utilizo
está lleno de esperanto en sus raíces;
inundado por la luz de tu sonrisa,
declamando su impotencia ante tus rizos
que desean escaparse de mis labios, de mis versos
para llegar a ser lluvia en los rincones
donde los amantes siempre furtivos
repiten nuestros ritos ya inventados.
Caracoleando besos, estas letras son tan sólo
tu declaración de independencia.

Poema extraído de "Corazón porvenir..." (2009)