miércoles, 14 de diciembre de 2016

ONIROPATÍA

Sumido en horizontes por explorar, mi vista se eleva de lo inmediato: no reconozco a los viejos amigos, que han de llamar mi atención. Están tan cambiados… se parecen a mis padres y sin embargo tienen mi edad. Les atiendo, sí, pero tengo la cabeza en otra cosa.
Bajo la nieve las piedras parecen perros muertos.

Fragmento #102

lunes, 5 de diciembre de 2016

Más letras... más gratis

Un blog de poemas a cuentagotas... como cualquier otra medicina.


A vuestra disposición desde ya, todo 2017

viernes, 11 de noviembre de 2016

Leonard Cohen

Buceando (con la nariz tapada) entre el infinito fárrago de tonterías que pueblan la Red, encuentro una noticia que además de relevante me provoca desazón. La muerte de Leonard Cohen no sólo significa que el mundo ha perdido un poeta... con lo necesario que resulta el oasis de su voz y sus palabras en la inmensa estepa desértica que llena el Universo. Además esta noticia está cargada de una frustración: ya jamás podremos retornarle el pago infinito que le adeudamos: se encuentra en otra dimensión, ajena a nuestras peregrinas cargas existenciales.
No es él quien ha perdido al mundo, está claro... podríamos decir incluso que ha ganado la ventaja que significa no tener que aguantarnos. Ahí fuera continúa la cadena de acontecimientos que jalonan la cotidiana farsa del vacío: por suerte conservamos algunos instantes eternos que alguna vez nos regaló Leonard Cohen. Entre ellos sus canciones y sus poesías, aunque también sus novelas o entrevistas. Esa especie de orfandad que hoy invade mi alma va mucho más allá de los cánones estéticos: generalmente huyo de cotidianidades, pero no podría dejar pasar este día tan señalado... entre los infinitos guiños de mis palabras, de todas las obras que voy construyendo: viaja la melodía de Suzanne. Acuna mi desconsuelo.

martes, 8 de noviembre de 2016

Un regalito...

Y todo el día con el cuerpo puesto, piensa la guapa que no puede quitarse de encima las curvas, el deseo ni las miradas. El cuerpo, maldición de la belleza.

... de un volumen en preparación.

martes, 25 de octubre de 2016

Versión 1.2 disponible en la web

Hace días del asunto, pero por si acaso hay alguien rezagad@ que no lo sepa, la versión 1.2 de las "malas memorias" está a libre disposición de quien desee tantearla.

También -en la sección de libros gratis- toda mi producción editorial hasta el momento. En breve, ampliada con un volumen de 400 poemas de los últimos 40 años: Tropecientos milk poemas... al que le faltan un par de toques: portada y edición Bubok, espero que antes de que acabe el año lo tengáis también en

www.malasmemorias.com

Todo gratis.

;)

domingo, 23 de octubre de 2016

A propósito de mis silencios...

Si supierais cómo me complace
no escribir,
castigaros no escribiendo...
En mi mundo sois sólo errores:
equivocaciones tan inevitables
como estos azotes
inútiles y necesarios.
Llamadas de atención
que lastran mis pies, porque
de otra manera podría
convertirme en buzo
que alcanzara la superficie
o también en globo aerostático
logrando llegar al cielo.

Incluido en Tropecientos Milk Poemas, de próxima aparición.

martes, 13 de septiembre de 2016

¿Presencia?

Hay algo erótico en recordarte, en tu ausencia. Recuerdo, deseo, anhelo... invaden mis sentidos hasta la explosión que es no tenerte: nuclear, apocalíptica. Inmensa.


miércoles, 6 de julio de 2016

Regalos de la perspectiva...

... que vienen a dar la razón a la vida.

Cuando el paisaje urbano es socialmente crítico... contestatario.

martes, 7 de junio de 2016

Versión 1.2 disponible en la red

Espero que ésta aguante un par de añitos... hasta la ampliación (que llegará, sin duda).

lunes, 6 de junio de 2016

RECICLAJE

A fuerza de ser todo el mundo
ya no sé quién soy.
Siento en mi interior fuerzas
indiscernibles, inescrutables.
Indago mis imposibles pasados
en escalones rotos
a través de escalones
aún por romper.

martes, 24 de mayo de 2016

Piénsalo...

Sale caliente, vuelve frío...

El aire de los pulmones, el producto del corazón.

martes, 17 de mayo de 2016

Unas pistas para ir revisando lo anquilosado

Ese territorio provisional y fungible, incierto y presto a caducar a cada jornada… es el puente que nos permite el traslado desde el dulce, suave y blandito país de la infancia hasta el mundo definitivo de la edad adulta a través de la oscura ciénaga que viene siendo la adolescencia: un paraje repleto de amenazas desconocidas contra las que nos previenen, sí… pero esa misma prevención resulta ser ya la primera de las amenazas.

Desfilamos sin brújula a través de semejante neblina metafísica, dejándonos guiar por las pistas que nos indican las presencias de otros ciegos como nosotros[1]: gritos al estilo de Munch, supuestas leyes universales descubiertas anteayer o intuiciones como migas de pan sobre el camino… palos de ciego.

Por fortuna, se trata de una etapa definida y concreta… aunque hay quienes –debido a esa niebla- pierden el norte y se instalan definitivamente en ella: convirtiendo la tienda de campaña en domicilio. Éstos nada tienen que ver con aquellos otros que pretenden y practican el credo de la eterna juventud: a pesar de que ambos grupos pertenecen a la misma familia léxica.

Transitar por este puente es una aventura repleta de peligros, sin duda: pero precisamente por eso: la recompensa es que nos curte y proporciona una armadura que nos permitirá enfrentarnos a la siguiente pantalla del vídeo-juego… aquélla consistente en ser persona adulta, con todas las consecuencias. Tras el introito de la madurez, llegará la vida en serio.



[1] Más que hablar estrictamente de ciegos, habría que referirse a los individuos que deambulan por esta ciénaga como si fueran los personajes de La niebla, el cuento de Boris Vian. Nadie puede ver, pero no por un defecto o una carencia de la persona, sino por la imposibilidad del entorno para hacer posible la visión.

sábado, 30 de abril de 2016

Vuelta y vuelta

Tengo en el bolsillo mi mordisquito de la manzana, esta variante de pecado original a la que atender y rendir culto a cada instante...

Soy un instrumento a su servicio, un juguete en sus manos (no al revés) con la aparente inocencia de algo diáfano.

Pero me aliena infinitamente y va conquistando poco a poco pequeñas parcelas de mi tiempo, invadiendo progresivamente intimidad y propiedades.

En breve no sabré vivir en su ausencia, ¿existe mayor conquista que ésa?


martes, 26 de abril de 2016

Passo...

Paso por la calle: contemplo a toda esa pobre gente, incapaz de la felicidad. Anclados a unos esquemas heredados que les impiden la vida. Incapaces de volar; ¿cómo pueden consumir sus días sin darse cuenta, sin reinventar la escala de valores?


domingo, 24 de abril de 2016

Versión 1.1 disponible en la web

Para celebrar los 400 años de haber enterrado a la competencia...

Nos vemos en los libros. Y siempre que queráis, en ese territorio inmaterial y difícilmente clasificable que se suele denominar espíritu.


martes, 5 de abril de 2016

Los hombres...

Los hombres suelen –cuando quieren sonreír- ponerse sin querer la sonrisa de su amada, como si de esa forma pudieran poseer lo que de inaprehensible tienen las mujeres, y consiguiendo sólo la mueca grotesca de un mal imitador, el rictus de su propia burla para terminar siendo una pobreza digna de infinita compasión.


sábado, 2 de abril de 2016

CURIOSIDAD

Me gustaría saber cuánta gente se pone cachonda escribiendo... y de ésta, cuánta necesita escribir para ponerse cachonda...

jueves, 17 de marzo de 2016

El hombre

Soy el que duerme con los perros en un paraje inhóspito, abandonando la casa para protegerla; soy quien se presta para aguardar en la encrucijada hasta que llegue la muerte o el diablo, pues generalmente el terror no ha dejado distinguirlos al populacho.

Es de noche, por supuesto; a lo lejos se oyen hombres, desde lejos llegan, más temibles que la muerte misma, porque son el diablo mismo. El hombre, la peor muerte, el peor diablo: más deleznable que cualquier animal, porque los perros me dan su calor mientras duermo.

Mis entrañas pueden estar tranquilas, yo vigilo que nadie se les acerque, nadie perturbe sus sueños; menos aún el Hombre.

martes, 16 de febrero de 2016

Un regalo inesperado: fragmento de un relato aún inédito

[...]

El sistema de ascensores, traicionero y con una clave incomprensible de micrófonos azul y verde, nos permite llegar a ese paisaje desvencijado: algo así como un grupo en retirada, la promoción universitaria recogiendo bártulos y haciendo la mudanza cuando ya ha terminado la carrera. Ese regusto de abandono y desamparo que deja en el alma haberse licenciado.


Los recovecos y estrecheces entre paredes desnudas, dan cuenta de un naufragio; escombros y ruinas procedentes de batallas tortuosas consigo mismo. Los habitáculos tienen puertas casi blindadas, selladas con siete cerrojos que impiden incluso escuchar a las bestias que albergan en su interior. Así y todo, parecen atractivos, tienta abrir alguna de esas entradas típicas del ‘teatro mágico’, como una pista o una advertencia, ésta tiene una cáscara de melón que pretende identificar al habitante; aquella otra, restos de yeso procedentes de algún bricolaje reciente; la de más allá es blanca y brillante, gracias a la excesiva luz que ilumina este laberinto; tan blanca como deslumbrante.

[...]

Nada más de momento. Que no os pase nada...



jueves, 4 de febrero de 2016

DETERMINISMOS

Si eres nuez... acabarás cascada (agua pura).

Hay quienes opinan que previamente al nacimiento tenemos asignada una cantidad de alcohol para la existencia... así que beben mucho para librarse rápidamente del débito.

Pero quizá su cantidad sea tan grande, que ni bebiendo toda la vida... cascada, sin duda.

lunes, 18 de enero de 2016

VENTILAR

¿Por qué es tan importante ventilar? Para acabar con un ambiente enrarecido, sea por el paso del tiempo o por las actividades sociales, ambas cosas dañinas.

Al ambiente le añaden oscuras fuerzas de neblina.

Pero ¡cuidado!: es importante saber ventilar, o al menos tener claro qué se busca. Porque a veces, introducir elementos nuevos en el ambiente ya equilibrado, significa romper la armonía.

Para ventilar adecuadamente, también hay que tener en cuenta el tiempo: cronos y clima. Demasiada ventilación es intemperie, eso por el lado cronológico.

Por otra parte, si el clima no es propicio, se avecina una catástrofe penetrando en casa; quizás en este caso sea mejor no ventilar, preferido el ambiente viciado al cataclismo.


martes, 12 de enero de 2016

Ni lo sé... ni me importa.

No sé quién eras, te he borrado sin remedio... pero recuerdo la tristeza que me inundaba cuando estaba sabiendo que de todas formas, de alguna manera te olvidaría.

Si algún psicoanálisis quisiera recuperarte, sólo encontraría la nostalgia de aquello que nunca se tuvo... algo así como la santidad que otorga el tango, llorar por lo que han perdido los demás: la irremediable belleza, la puta que llena el cielo, ese Dios que nos mintieron y nunca existió.