lunes, 16 de febrero de 2015

Mística profana

En la soledad que es tu ausencia, visito nuestros santuarios otrora compartidos.

Jalonan mis días como un Vía-Crucis, delimitan el territorio de una felicidad que sólo tú y yo podemos comprender. Tu ausencia lo llena todo de una forma absoluta, infinita: casi podría decirse que es mi Dios.


Desde esta perspectiva resulta casi imposible ignorar dónde estarás ahora, qué harás en este instante tan lleno de tu vacío. Cuáles serán las realidades que definen tu alrededor, tu entorno.


5 comentarios:

  1. Lástima que nunca sabrá cuán amada es...

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  2. Buena, buena... tu carcajada horizontal.

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  3. Pudiera ser que ella estuviera más cerca de lo que el autor cree... que es una presencia ignorada por no reconocida...

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